Agotado ya de buscar unos zapatos para el traje que mañana voy a llevar al trabajo entro en una tienda un poco pija a ver si consigo algo. El dependiente se comporta desde el principio muy amable y se ofrece a enseñarme barios modelos. Empiezo a ponerme pero que muy cachondo cuando él mismo se pone de rodillas para probarme los zapatos. Mientras él me mira y juguetea con mis pies yo empiezo a sobarme la polla. Pierdo el control por completo y termino castigándole el culo salvajemente una y otra vez.