Compañeros de trabajo, vaya follada que se meten.. Y yo pensando que lo que pasaba es que no te gustaba mi polla. Me encanta terminar el día con el pollon de mi cliente destrozándome la boca. Saboreando la polla que luego le entrará por el culo Le gusta volverse un objeto sexual y no parar de comer polla Mi chico, hasta que no lo traga no para.. Pero como no voy a pecar si me vuelve loco cabalgar el rabo de este curita. Pero qué buena está la pizza del repartidor. Hay que ver lo que le gusta el palo de mi escoba a mi compañero de piso. Nada más rico que relamerte de gusto con el rabo de un completo desconocido.