Uno de mis mejores amigos aparece en mi casa de madrugada pidiéndome que le deje quedarse a dormir por qué ha discutido con su mujer. No puedo decirle que no y lo peor que esta noche no voy a poder dormir por qué siempre que lo tengo cerca me pone a cien. No logro controlarme cuando le veo dormido en la cama y empiezo a sobarle la polla y metérmela en la boca antes que me diga que no. Menuda sorpresa cuando mi amigo empieza a gemir pidiéndome mas. Y que maravilla con mi polla calentita dentro de su culo.